Melamil®
Complemento alimenticio a base de melatonina al 99% que ayuda a conciliar el sueño
Cuando llega el verano es el momento de planificar las vacaciones y un buen plan puede ser hacer un viaje por carretera en coche, ya que de esta manera podemos parar en los sitios más interesantes y recorrer varios lugares sin limitaciones. Sin embargo, viajar en coche con niños, aunque puede ser una experiencia maravillosa, para algunos pequeños puede ser un poco desagradable. Hay niños que sufren mareos y eso puede convertirlo en un momento difícil, sobre todo en el caso de recorrer largas distancias.
Si en la familia tenéis planeado un viaje próximamente, es lógico que tengáis un poco de recelo a la hora de transportaros en coche. Para evitar en la medida de lo posible que los más pequeños sufran ciertas molestias durante los trayectos, aquí te ofrecemos algunos trucos y consejos para evitar que tus hijos se mareen durante los viajes en coche. Seguro que si lo ponéis en práctica disfrutaréis de unos road trips muy divertidos.
Si es posible, lo más adecuado es programar el viaje durante las horas en las que tus peques suelen dormir. Mientras los niños duermen se reduce el riesgo de mareo, ya que cuando están dormidos, no están enfocados en los movimientos del coche.
Asegúrate de que el coche esté bien ventilado. Aunque en la autopista es más complicado, abre las ventanas de vez en cuando para permitir la entrada de aire fresco. También es importante evitar los olores fuertes en el coche, como perfumes, alimentos o ambientadores, ya que pueden aumentar la sensación de mareo.
El asiento trasero del medio es el lugar más estable y tiene la menor cantidad de movimiento. Coloca a tu hijo en este asiento si es posible, y asegúrate de que esté mirando hacia adelante. Evita que lean libros o jueguen con dispositivos electrónicos, ya que fijar la vista en objetos cercanos puede empeorar el mareo. Puedes intentar distraerlos cantando canciones o con otros juegos.
Anima a tus hijos a que miren por la ventana durante el camino, enfocándose en un punto fijo en el horizonte, sobre todo si viajáis con la luz del día. Esto ayuda a su cerebro a sincronizar la información visual con el movimiento que siente el cuerpo, reduciendo la sensación de mareo.
Cuando se viaja con niños hay que ser más flexibles con la hora de llegada y adaptarse a sus necesidades. Realiza paradas frecuentes durante el viaje que les pueda permitir a los peques salir del coche, respirar aire fresco y estirarse. Un pequeño descanso cada una o dos horas puede hacer una gran diferencia en cómo se sienten.
Mantén a tus hijos bien hidratados, pero evita darles demasiados líquidos de una sola vez, es mejor que beban pequeños sorbos cada rato. También es importante que coman alimentos ligeros antes y durante el viaje. Evita comidas muy pesadas y grasosas, ya que pueden aumentar la sensación de náuseas.
Algunas madres encuentran útiles los remedios naturales, como el jengibre. Puedes darles galletas de jengibre o caramelos de jengibre antes del viaje. Consulta con tu pediatra antes de probar cualquier remedio natural para asegurarte de que sea seguro para tu hijo, sobre todo si sufren de algún tipo de alergia o intolerancia alimenticia.
Si tu hijo se marea con frecuencia y los otros métodos anteriores no funcionan, consulta a tu pediatra sobre la posibilidad de usar medicamentos formulados específicamente para el mareo. Existen productos naturales de venta libre en farmacias que pueden ser seguros y efectivos para ellos y les evitará que lo pasen mal durante el camino. Un ejemplo es Náusealiv, que ayudará a reducir las náuseas y vómitos.
Mantén a los niños entretenidos con juegos que no requieran mirar hacia abajo. Las canciones, las historias contadas o los juegos de palabras son buenas opciones para que no se aburran o te pidan usar pantallas. Evita las actividades que involucren leer o usar una tablet o el teléfono móvil.
La manera de conducir y la velocidad también puede empeorar la sensación de mareo, por lo que te recomendamos que la conducción se haga de manera suave y constante. En la medida de lo posible evita frenadas y aceleraciones bruscas, así como curvas cerradas. Una conducción más suave puede ayudar a reducir el mareo.
Como puedes comprobar con esta información, prevenir este tipo de molestias en los más pequeños requiere un poco de planificación, paciencia y atención a sus necesidades durante el viaje. Con estos consejos y trucos, puedes hacer que los viajes en coche estas vacaciones sean más cómodos y agradables para toda la familia y sobre todo para ellos. ¡Buen viaje!