La Pandilla del Valle y el Misterio del Algodón

En un pueblito rodeado de verdes colinas vivían cuatro amigos inseparables: Mónica, Margarida, Tico y Simón. Les encantaba sembrar, recolectar frutas y aprender sobre la vida en el campo.

En un pueblito rodeado de verdes colinas vivían cuatro amigos inseparables: MónicaMargaridaTicoSimón. Les encantaba sembrar, recolectar frutas y aprender sobre la vida en el campo.

Un día, mientras paseaban entre huertos y naranjos, encontraron una verja de madera entreabierta. Al otro lado, se extendía un campo blanco como las nubes.

—¿Qué será eso? —preguntó Margarida.

—Parece nieve... ¡pero no hace frío! —dijo Tico, curioso.

Una señora mayor que regaba las plantas los saludó con una sonrisa.

—Es algodón —les explicó—. Una planta muy especial. ¿Queréis aprender cómo se cultiva?

Los cuatro asintieron enseguida. Durante toda la tarde, la mujer les enseñó a sembrar las semillascuidar la tierra con mimo y esperar pacientemente a que las cápsulas del algodón se abrieran como pequeños copos.

Pero lo más mágico ocurrió al final: cuando cada uno sembró su semilla, una suave brisa sopló… y del algodón brotaron destellos brillantes como si les dieran las gracias.

—Cuando se cultiva con cariño —dijo la señora guiñando un ojo—, el algodón habla sin palabras.

Desde aquel día, Mónica, Margarida, Tico y Simón no solo jugaron en el campo, sino que también se convirtieron en pequeños expertos del algodón, compartiendo con todos lo que habían aprendido… y cuidando cada brote como si fuera un tesoro.

 

Conoce nuestros productos
Volver arriba